De acuerdo con el Informe de Producción Agropecuaria realizado por Coninagro en septiembre de 2024, el sector agropecuario argentino se enfrenta a un escenario mixto. El reporte detalla tanto desafíos como oportunidades en la producción de granos, carnes y productos regionales. A continuación, se presentan los datos más relevantes.
Granos: Aumento en la producción, pero caída en el valor
Las primeras estimaciones de la campaña 2024/2025 proyectan una producción de 130 millones de toneladas de granos, un 8% superior al promedio de las últimas cinco campañas. Este crecimiento está impulsado principalmente por el trigo, cuya producción alcanzará los 18,6 millones de toneladas, lo que representa un incremento del 23% respecto al ciclo anterior. Sin embargo, el maíz muestra una tendencia opuesta, con una caída del 17%, situándose en 9,5 millones de toneladas menos que el año pasado.
En cuanto a los precios, la tendencia bajista se ha quebrado, con soja y maíz registrando un incremento del 4% en comparación con los valores de agosto. No obstante, si se comparan con los precios de los últimos cinco años, los actuales son un 15% más bajos, lo que impacta directamente en el valor bruto de producción, proyectado en 39.045 millones de dólares, un 4% por debajo del año anterior.
Carnes: Contracción en bovina, estabilidad en aviar y crecimiento en porcina.
La producción total de carnes en los últimos 12 meses fue de 6,2 millones de toneladas. Sin embargo, la carne bovina mostró una retracción del 7%, una tendencia que continuará hasta fin de año debido a la baja oferta. Por otro lado, la carne porcina experimentó un crecimiento del 5%, regularizando su producción a niveles previos a la pandemia. La carne aviar, tras la reapertura de las exportaciones, ha mantenido una producción estable.
Leche y productos regionales: Preocupación por la caída
El sector lácteo enfrenta dificultades importantes, con una caída del 9% en la producción respecto al año anterior, ubicándose también un 6% por debajo del promedio de los últimos cinco años. Esta situación refleja los desafíos que sigue enfrentando la industria debido a factores climáticos y económicos.
En cuanto a los productos regionales, las legumbres muestran señales de recuperación, impulsadas por las mejoras climáticas. Sin embargo, los cítricos presentan una alarmante caída del 20%, lo que significa una reducción de 250 mil toneladas, afectando principalmente a las economías regionales dependientes de este cultivo.
Conclusión.
El informe agropecuario de septiembre 2024 refleja un panorama contrastante: mientras algunos sectores como el del trigo y la carne porcina logran repuntar, otros, como la leche y los cítricos, enfrentan fuertes desafíos. El clima, la demanda internacional y los precios jugarán un rol clave en determinar el futuro inmediato del sector agropecuario argentino.
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