La tradicional cena con la que el Movimiento Productivo Argentino celebra los aniversarios de su fundación tuvo este año características destacadas.
En esta ocasión, la reunión para celebrar el 17° cumpleaños de la entidad, que fundaran Raúl Alfonsín y Eduardo Duhalde con el objetivo de nuclear el pensamiento productivista disperso después de más de dos décadas de predominio del sector financiero, reunió a un destacado conjunto de personalidades de la política y de la comunidad productiva junto a otros actores sociales relevantes.
Durante el encuentro, que se llevó a cabo el lunes 24 de setiembre en las instalaciones del San Juan Tennis Club de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hubo discursos de Ricardo Alfonsín, destacado dirigente del radicalismo, y del ex presidente de la nación Eduardo Duhalde, presidente del MPA.
En ellos se destacó la importancia del encuentro entre los argentinos, del diálogo fecundo y de la búsqueda de consensos entre las fuerzas políticas mayoritarias, que permitan sacar al país de la profunda crisis económica, política y social en la que se encuentra y ponerlo en la senda del crecimiento productivo y el desarrollo.
Para ello, coincidieron ambos expositores, el único camino es, como lo expresa el lema del MPA, “Producir más y distribuir mejor”.
Párrafo aparte mereció la enfática mención de la Prospectiva como metodología idónea para el planeamiento de políticas públicas.
En un marco de animada cordialidad, signada por los reencuentros y los abrazos, siguieron las alternativas de la cena – que incluyó música y la proyección de un video institucional- autoridades del MPA, con Alfredo Atanasof y Carlos Brown a la cabeza, los ex gobernadores Felipe Solá y Daniel Scioli, gremialistas como Hugo Quintana y Horacio Valdez, ex ministros, representantes del Club Político y funcionarios y ex funcionarios del poder legislativo y el poder judicial.
Ausentes por problemas de agenda, mandaron su saludo y su adhesión Roberto Lavagna, Aldo Pignanelli, Juan Manuel Urtubey y, por estar de viaje, Chiche Duhalde.
Al filo de la medianoche y cuando ya se empezaban a notar los efectos del paro general, los asistentes coincidieron en un brindis final por la Patria.